Se estima que el número de migrantes en todo el mundo es de casi 300 millones, según la División de Población del Departamento de Asuntos Económicos y Sociales (DESA). Moverse de un país a otro, estar en constante tránsito es un derecho que tiene el ser humano.

De estos 300 millones de migrantes, muchos han salido de sus hogares buscando mejores oportunidades económicas, por reunificación familiar, por estudios; sin embargo, hay otro grupo que se desplaza o huye de sus naciones de origen por necesidad debido a conflictos, persecuciones políticas, abusos, terrorismo, violaciones a los derechos humanos, desastres naturales y otras causas.

Este grupo de personas representa el 3,5% de la población mundial. Las mujeres representan el 48% de la población que migra y casi tres de cada cuatro migrantes tiene entre 20 y 64 años, pero un dato muy relevante es que 41 millones son menores de 20 años. 

La Plataforma de Coordinación Interagencial para Refugiados y Migrantes de Venezuela especifica que 7.722.579 venezolanos han salido de su país, y de estos 6.538.756 viven en países de América Latina y el Caribe.    

De los más de siete millones, 4.485.470 cuentan con permisos de residencia y de estancia regular en los países de acogida, 1.184.889 tiene solicitudes de asilo pendientes recibidas por las autoridades nacionales y solo 300.759 personas venezolanas tienen aprobado el reconocimiento de refugiado por los países de recepción. 

Las personas migrantes son más vulnerables y son más propensas a sufrir de acceso limitado a necesidades básicas como la salud y tienden a enfrentar estigmatización. Y los trabajadores según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), consiguen empleos temporales y de carácter informal o  sin ningún tipo de protección exponiéndolos a mayores riesgos.

Las Naciones Unidas especifica: “los migrantes han demostrado ser fuente de prosperidad, innovación y desarrollo sostenible para los países de origen, de tránsito y de acogida. Sus contribuciones financieras a través de las remesas ofrecen una cuerda salvavidas para las familias y estimulan los mercados locales, en especial los de países que cuentan con ingresos bajos y medios”. 

¿Qué significa ser un migrante?

Una persona que ha cambiado su país de residencia es definida como migrante internacional, según las Naciones Unidas. En este concepto se incluye a todos los migrantes sin importar su situación legal o los motivos de su movilidad.    

Para las Naciones Unidas la contribución de las personas migrantes en los países de acogida es fundamental. En las metas de la Agenda 2023 para el Desarrollo Sostenible se reconoce el crecimiento inclusivo de esta población y el principio básico de la agenda “no dejar a nadie atrás”, y en este grupo están las personas migrantes. 

En las metas quedó establecido: “Facilitar la migración y la movilidad ordenadas, seguras, regulares y responsables de las personas, incluso mediante la aplicación de políticas migratorias planificadas y bien gestionadas”. 

Día del Migrante

Cada 18 de diciembre se conmemora el Día de las Personas Migrantes, luego que el 4 de diciembre de 2000 la Asamblea General, ante el aumento de los flujos migratorios en el mundo, proclamó el Día Internacional del Migrante. 

Sin embargo, diez años atrás, en ese mismo día en 1990, la Asamblea ya había adoptado la Convención internacional sobre la protección de los derechos de todos los trabajadores migratorios y de sus familiares.

Los países que integran la asamblea, las organizaciones gubernamentales y no gubernamentales, trabajan este día para difundir información sobre los derechos de estas personas, sus libertades y experiencias en los países de acogida.