Con más incidencia en más de dos municipios del departamento, la Corporación Profesionales Procesando Vid (CORPOVID), sigue apostándole a la construcción de territorio a través de estrategias que buscan que todas las comunidades que se encuentran en condición de vulnerabilidad tengan voz y voto para construir una sociedad más equitativa.
La resignificación del territorio ha sido una de sus principales banderas, atendiendo a población migrante y retornada y de acogida que busca nuevas oportunidades en el país, por lo que se encuentran realizando la planeación estratégica de este año, incluyendo el arte, la cultura y el deporte como herramientas transformadoras.
Su trabajo, sin ánimo de lucro, ha logrado incidir en diversas comunidades y actualmente se encuentran también dentro de otros municipios como Villa del Rosario, prestando especial atención a poblaciones de niñas y mujeres que se encuentran en zonas con contextos de violencia.
“Nosotros no somos cuadriculados y escuchamos muy bien a las comunidades y lo que tratamos de hacer es que además de que se sientan escuchado, aprendan cosas nuevas o se den cuenta de otras, porque la violencia se encuentra muy normalizada y no debe ser así”, señaló Ana Isabel Muñoz, actual directora de la corporación.
De esa forma, Corpovid es una organización que, como muchas en Cúcuta, le apunta a la innovación y a la transformación de un territorio que ha sido fuertemente golpeado por la violencia y otros factores que han impactado a sus habitantes, teniendo en cuenta además su condición de frontera.
Por el momento, en su proceso de planeación se encuentra la gestación de dos nuevos proyectos que esperan traer metodologías que no solo dejen un aprendizaje dentro de los y las participantes, sino que estos también repliquen sus conocimientos y construyen una red de conocimiento que ayude a seguir avanzando en este largo pero gratificante proceso.
Muñoz explica, que una de las razones que la impulsan a seguir en esta maravillosa labor es ser testigo del cambio que se refleja luego de las acciones y sobre todo saber que es partícipe de eso, para así poder darle voz a comunidades que incluso han sido silenciadas históricamente y ahora reclaman sus derechos como ciudadanos y ciudadanas.
Además, hace el llamado a continuar informándose y sobre todo a seguir creyendo en las iniciativas y proyectos que pretenden ayudar a la región a resignificar y reparar los daños que ha dejado la violencia sobre ella y sus habitantes.
