Los venezolanos Gerardo y Gianfranco Giordano, padre e hijo, comenzaron una nueva vida en Norte de Santander con una fábrica de postres y galletas llamada Alimentos Colombeia, con el que buscan posicionarse en el mercado nacional. Este esfuerzo también ha sido posible gracias a la ayuda del personal colombiano, demostrando que juntos -sin importar la nacionalidad- se pueden lograr los objetivos para el bienestar común.
La situación del vecino país los motivó a migrar a Cúcuta, específicamente en Villa del Rosario, donde luego instalaron una pequeña planta para producir productos de alta calidad como brownies, galletas (isabelitas) y mantecadas, las cuales son distribuidas en varios supermercados de la ciudad y otros municipios del departamento.
“Es bonito ver como una idea se va transformando en toda una empresa y que esa empresa es también responsable de otras familias, es bonito ver ese crecimiento, ese trabajo en común con el mismo propósito, que es estar bien”, dijo Gian Franco Giordano, gerente de tecnología de la empresa. Confesó que este ha sido su segundo emprendimiento en la ciudad y aprovechó que ya tenían 300 clientes para ofrecerles galletería empacada.
Las materias primas utilizadas para la elaboración de los productos son de Norte de Santander y de Santander, como el bocadillo, que es muy típico de la región y también el cacao.
“Estamos agradecidos con todos los organismos y con toda Colombia y con las personas porque todos nos ayudaron en las facilidades que hay para abrir una empresa para realizar todos los protocolos que hacen falta para hacerla operativa son muy amplias y bueno también el apoyo que tenemos del mismo personal colombiano que trabaja con nosotros es excelente”, expresó Gerardo Giordano.
Trabajando juntos
La colombiana Roxana Mendoza fue de las primeras en formar parte del equipo de la empresa. Empezó como impulsadora, ofreciendo los productos en los comercios, y actualmente es la gerente de mercadeo y ventas por redes sociales en los supermercados.
Destacó que la integración entre ambas nacionalidades ha sido primordial para avanzar juntos por un mismo fin. “Creo que la responsabilidad y las ganas de trabajar y el conocimiento no tienen nacionalidad y aquí en Colombeia todas las personas que tengan ganas de trabajar y que quieran hacerlo están bienvenidas (…) No interesa si eres venezolano, de Perú, de Ecuador o colombiano, aquí vamos a recibir a las personas si tienen ganas de hacerlo”, mencionó.
Por su parte, María Haydée Parada valoró la constancia de los emprendedores venezolanos y agradeció la oportunidad que le han brindado de desempeñarse como asesora comercial dentro de la empresa. “Yo los admiro mucho porque ellos empezaron de cero como toda persona y pues ahorita ya están creciendo y lo bueno es que están dando oportunidad a otras personas a crecer con ellos van a generar empleo y eso es lo que nosotros ahorita buscamos”, mencionó.